Muchas noches sin dormir, muchos viajes, muchas horas de trabajo, mucho esfuerzo, este sería el resumen de las monterías de la Asociación Deportiva Lances Monteros, una gran dedicación para la preparación de cualquier jornada de caza que organiza la directiva de este grupo de amigos, enamorados de la montería española y de todo lo que la rodea.
El jueves 8 de diciembre día de la Inmaculada Concepción patrona de España monteábamos la segunda del calendario de esta temporada, nada menos que en la finca Los Engarbos, la mancha Barranco de Gómez, eso sí, solamente a guarros, no nos da el presupuesto de momento para más.
Una mañana fría pero soleada nos daba la bienvenida al cortijo del Engarbo, poco más de las nueve de la mañana y la totalidad de los socios estábamos tomando un café y unos dulces para afrontar el sorteo de los 45 puestos que cerrarían esta mancha de 600 has. cercana al embalse del Guadalmena.
Con una salve montera rezada por mi hija, dábamos paso al sorteo y la salida de los cierres de inmediato.
Eso sí, recordando a los monteros las normas de seguridad y las especies cazables en la batida, zorro y jabalí.
El cierre del Robledal me tocaba montar, 10 puestos en total, los primeros más cerrados de cortadero y los últimos de balcón en riscas dando vista al barranco de Gómez, un espectáculo visual de la naturaleza, a mi izquierda quedaba el río Guadalmena a su salida del embalse.
A las 12:00h. se fueron soltando las 16 rehalas asistentes en diferentes puntos estratégicos para intentar limpiar la mancha de reses y posteriormente centrarnos en los marranos. Nada más soltar, las ladras y el ir y venir de venados y ciervas fue un espectáculo, algún guarro iba dando la cara entre la espesura y los lances se sucedían intermitentemente. Las rehalas hicieron un trabajo fuera de lo normal y el desgaste de los perros y sus podenqueros hizo mella al final de la montería, se dejaron la piel para mover tal cantidad de caza, muchas reses arrastraban a rehalas enteras y dificultaban el desencame de los cochinos.
Aun así los monteros anduvieron bastante finos y consiguieron abatir 22 jabalíes destacando dos bocas espectaculares cobradas por los monteros Manuel Gómez Fernández y Alfonso Asperilla, felicidades a ambos.
Yo me tube que conformar con las vistas y las carreras de los venados, otra vez será, sólo vi un cochino pero demasiado lejos como para probar suerte.
El plantel final tardó en completarse debido a la orografía del barranco hasta que las caballerías lograron sacar todas las capturas, también se produjeron algunos agarres de cervuno por parte de las rehalas pero no era nuestro objetivo.
Con un café, un pastel y una copa el que quiso, dábamos por terminada la jornada al calor de una hoguera improvisada para combatir el frío que se apoderaba de la noche.
Como siempre hago, agradecer a todas las personas asistentes el buen comportamiento y profesionalidad, monteros, rehaleros, cocineras, muleros, etc. sin olvidarme de la guardería de Egmasa, siempre derrochando esfuerzo por hacer que las cosas salgan bien y en particular a Alberto, que ha sido el responsable de la preparación de la mancha, gracias también a los agentes de medio ambiente por velar para que se cumplan las leyes y las normas durante la jornada de caza.
Os doy paso a las imágenes que son muchas y muy buenas
No hay comentarios:
Publicar un comentario