Como bien dice mi amigo Fran Carrasco, hemos monteado en cualquier día de la semana, pero nunca en lunes, algo atípico, pero como se suele decir, sarna con gusto no pica.
Este fué el día elegido por esta familia, sin entrar en detalles, para celebrar un gancho de cochinos en su finca Coto Basilio, cercano a las Lagunas de Ruidera.
Nos reuníamos en el cortijo del Navazo, finca colindante, por aquello de no molestar a la caza. El grupo lo componíamos unos buenos amigos de la família y algunos puestos más, para cerrar esta bonita mancha de unas 500has.
La gestión que viene realizando esta familia, está mayormente enfocada a la caza menor; en el coto abundan las perdices autóctonas y el conejo, disponiendo de numerosas siembras y majanos, para dar comida y cobijo a los animales, siendo los propietarios grandes amantes de la caza del reclamo.
En el coto hay zonas de monte apretado y muy querencioso para los marranos y como buenos conocedores de esta querencia, no dudaron en preparar este gancho para controlar la especie y a su vez deleitarnos con un fantástico día montero.
En mi puesto no tuve fortuna, pero desde allí pude oír una veintena de disparos, repartidos en las tres horas que duró la cacería.
La família anfitriona había tenido mucha suerte, y habían cobrado dos estupendos navajeros y hasta un total de 5 en el resto de puestos.
Con estas escasas líneas, quiero agradecerles la invitación que nos brindaron y felicitarles por los trofeos obtenidos. No cabe duda que pasamos un gran día de caza en compañía de amigos, y esperemos poder seguir disfrutando de días como este, donde prime la amistad y no los resultados.
También quiero felicitarles por poseer esta finca tan bonita y bien cuidada, se nota que aman el campo y disfrutan gestionando su coto.
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